Agenda post 27/10: La guerra por el PJ

Rumores de una intervención del Partido Justicialista comenzaron a circular, justo cuando Daniel Scioli diseña su proyecto presidencial en base al mismo. Tanto el peronismo cristinista como el no cristinista se disputarían el control orgánico del PJ. Los anhelos. El papel de Sergio Massa.

CIUDAD DE BUENOS AIRES (Urgente24). "El PJ será intervenido, según nuestras fuentes, a fin de año, por su conductora real", disparó Jorge Asís este viernes (25/10)desde su portal. La utilización de la estructura partidaria del justicialismo será eje de debate en el proceso político que se abre a partir del 28/10.

El principal interesado en el control del Partido Justicialista es Daniel Scioli, su actual titular, quien pretende construir su proyecto presidencial a partir de la estructura de la institución. Incluso, ya adelantó que quiere que el candidato para 2015 resulte de la interna partidaria.

Para demostrar que en la sede de la calle Matheu hay más movimiento que el de las arañas que tejen su tela en los recovecos del edificio, Scioli convocó al Consejo Nacional a fines de septiembre. Allí, el exmotonauta puso énfasis en que el peronismo, en su rango institucional, es el"partido de gobierno".

El cristismo mantiene sus diferencias con el gobernador de la provincia de Buenos Aires. Y prefiere tener una alternativa antes que tener que bendecirlo como el delfín de "el modelo". Pero cualquier candidato que desee la Casa Rosada también debería fortalecerse dentro de la organicidad del peronismo.

Pero la guerra del PJ no se libraría únicamente entre las facciones del actual oficialismo. Los peronistas disidentes también guardan el anhelo de la conducción partidaria, sobre todo en tiempos de flaqueza del Frente para la Victoria, sostenido por el PJ.

Un sector que puede representar, entre otros, Eduardo Duhalde,  aspira a la irrupción de Sergio Massa dentro de la estructura partidaria. Massa se resiste. Le aconsejan que sea paciente,  que una vez que se consolide su victoria el PJ se vendrá a ofrecer solo.

Por otro lado, el intendente de Tigre se escuda en que el partido hoy no ofrece garantías de transparencia. Una eventual intervención que guíe hacia la normalización dejaría -creen los disidentes- sin argumentos al líder del Frente Renovador.

En el cristinismo parece más claro el objetivo. Sacarle a Scioli el aparato, quedárselo y comenzar desde allí a instalar a un candidato que sea de mayor agrado. Una tarea titánica, dado que Scioli es aún el peronista con mejor imagen de todo el país. Eso sin contar que no necesita instalación alguna.

¿Cómo intervenir el partido? No hacen falta mayores argumentos. Los congresales que definen la conducción del Consejo Nacional del PJ vienen con mandato prorrogado desde hace años, sin que haya mediado algún proceso eleccionario. Un motivo suficiente para que cualquier afiliado dolido solicite que se haga algo.

En la provincia de Buenos Aires quedó expuesto. El PJ local está en riego de perder su personería y por ello convocó a elecciones para el 15/12. Scioli está en condiciones de convocar comicios para la renovación de autoridades. Si avanza, tomaría la delantera en cualquier discusión.

Esto no lo permitiría el cristinismo. Aunque a la presidente Cristina Fernández le importe poco y nada la estructura partidaria del PJ. Ya lo dijo varias veces. Sería una iniciativa de sectores más vinculados al aparato. Un Carlos Kunkel, por ejemplo, quien encontró en el relego del partido uno de los argumentos de la derrota en las PASO, a replicarse el domingo 27/10.

Tampoco hay que perder de vista las apetencias del peronismo no cristinista.

El control del PJ será uno de las disputas centrales en la carrera hacia 2015.